22 de septiembre de 2009

El fanatismo es...

el deporte de la ignorancia y el fiel reflejo de las personas que no tienen un porqué para vivir.
Harto uno de tanta provocación a la Constitución Española, al Estado de Derecho que, día si día también, tienen en boca las 24 horas del día, me propongo escribir estas líneas desde la la desolación que me invade desde que en Arenas de Monte -más conocido como Arenys de Munt- se dio un paso más -el más grande en mucho tiempo- hacia la provocación a los pilares de nuestra democracia.

Un referendo como el que se convocó en dicha localidad es un ataque frontal a la legalidad puesto que significa ir de frente contra el artículo 2 de nuestra Constitución ya que pone en duda la "indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles". Y digo siembra la duda. No digo que se cargue dicho artículo. Especifico porque siempre aparecerá el listillo de turno que vendrá a decir aquello de que "es una simple consulta que no tiene más recorrido jurídico-institucional".

Y vaya si lo tiene. Tras dicha consulta popular ya son 15 los municipios catalanes que se han apuntado al carro, lo cuál pone de manifiesto que, abierta la veda -contra las bases de nuestro sistema- cualquier alcalde que no tenga otra cosa más importante que hacer en su municipio -les aseguro que alguna siempre hay- se lanzará a la piscina del independentismo más recalcitrante y rancio para intentar llevarse a su cuello la medalla del antiespañolismo -a mucha honra pensarán-.

Ahora bien si grave me parece el agravio a nuetra Ley Suprema, más grave me parece aún el silencio que vienen manteniendo los más altos cargos del Estado Español. No se puede consentir que desde el Gobierno se tache esta ofensa de "irresponsabilidad" y se queden todos con los brazos cruzados para esperar a que amaine el temporal porque mucho me temo que el temporal, en vez de amainar, se recrudecerá. Y tampoco se puede consentir que CIU abandere el regionalismo moderado y llegada la hora de la verdad se pase al bando del radicalismo antiespañol más propio de ERC. Sin olvidarse por cierto del PSC que de todos es sabido que de España quieren saber lo justo -Ministra Chacón incluida- aunque para poner el cazo de la financiación pagada por todos los españoles son los más listos de la clase todo hay que decirlo.

Asi que, y voy concluyendo, preparense para toda una ristra de referendos que ponen en duda nuestros sistema de las autonomías y preparense también para contemplar como el problema del independentismo que otrora teníamos-y seguimos teniendo- en el País Vasco parece que contagia a Cataluña. La época en que Terra Lliure atentaba contra todo aquel que se opusiese a sus tesis independentistas ya pasó pero el cruzado podría volver si se alimenta desde el radicalismo la tesis de la "cruzada" por la autodeterminación catalana y la pasividad envuelve los pilares del Estado de Derecho. Dios no lo quiera.

11 de septiembre de 2009

"No habéis convencido a un hombre...

...por el hecho de haberlo reducido al silencio". Estas palabras fueron pronunciadas por Jonh Morley, escritor, político y periodista inglés que vivió a caballo entre finales del siglo XIX y principios del XX. La frase deja poco lugar a la equivocación. Reducir a una persona al silencio por medio de la tortura, la amenaza, la extorsión... no significa que ésta comulgue con piedras de molino. No quiere decir que dicha persona se arrodille ante su verdugo, al menos moralmente, y le de la razón a sus descerebrados actos o a sus macabras intenciones.

Se cumplen ocho años del atentado de las Torres Gemelas. 11-S. Con solo pronunciarlo un escalofrío recorre cada uno de los poros de mi piel. Una imagen se me viene a la cabeza mientras tanto: una enorme bola de fuego que devora los esqueletos de las torres hermanas. Un avión que, con su impacto, consigue tambalear los cimientos del sistema democrático americano, esto es, la estructura sobre la que se asientan el resto de democracias del contexto internacional. El atentado fue algo más que una "simple" vulneración de las libertades individuales de las personas que allí estaban o de la libertad de un país como Estados Unidos que, en conjunto, lo sufrió. Aquel ataque significó el pistoletazo de salida, nunca mejor dicho, para que las grandes potencias internacionales se tomasen en serio la amenaza que el terrorismo islamista, abanderado por países con los que se habían tenido ciertos coqueteos comerciales años atrás, representaba.
El mundo no ha vuelto a ser el mismo. Ni mucho menos. Ni visto desde lejos. Desde entonces las guerras en los países mas islamizados se han sucedido. Las poblaciones más abandonadas a la ignorancia se han entregado en cuerpo y alma (nunca algo estuvo mejor dicho, léase atentados kamikazes) a la yihad, su particular Guerra Santa. Lo dejan todo para emigrar al paraíso. Las familias de sus víctimas emigran de su vida cotidiana para caer en la deseperación, en el dolor más profundo, en la incomprensión de una situación que se les hace grande...
Mientras que exista la incultura y el analfabetismo moral en los hogares de esa gente que se entrega a la causa sin pararse a pensar en el acto tan ruin que va a cometer, estoy convencido de que seguirán cometiéndose tales actos cuya denominación no encuentro debido a lo limitado de la mente humana para denominar algo tan maligno como es el hecho de matar con "causa" justificada. No existe razón para matar a un semejante. No hay palabras que me convenzan de que tal acto es justificable o ínfimamente entendible.
Ocho años después, el mundo es más inseguro a pesar de que las medidas de seguridad se han incrementado hasta niveles de auténtica paranoia. Ocho años después no nos han convencido de que sus actos tienen justificación. Ocho años después ni tan siquiera los que perecieron han sido convencidos...

9 de septiembre de 2009

"Lo que está en nuestro poder hacer...

...también está en nuestro poder no hacerlo". Son palabras citadas por Aristóteles hace ya un tiempecito y solo con leerla de pasada es muy sencillo comprender el significado que se esconde detrás de cada una de sus letras. En nuestra vida diaria, en nuestros actos, en nuestras actividades, en nuestros comportamientos siempre tenemos dos opciones muy simples: hacer o no hacer lo que se nos pasa por la imaginación, cometer o no cometer los actos que se nos ocurren... en la elección de nuestros actos va aparejada la responsabilidad de cada cuál y también a su realización van emparejadas las consecuencias que se deriven de los mismos.

El pasado domingo el presidente del (des)Gobierno, Jose Luis Rodriguez Zapatero, estuvo en la localidad leonesa de Rodiezmo acompañado entre otros por el milenario Alfonso Guerra, la tan femenina Leire Pajín y la ministra que en los últimos tiempos de dedica a fomentar la desigualdad con decretos-embrollo, la inestimable Bibiana Aido. Aquel acto se convirtió en una arenga a las tropas más ultraizquierdistas para que mantuviesen la moral alta con la que está cayendo (y muy especialmente con la que les está cayendo aunque me atrevo a aventurar que es más bien escasita comparada con la que les podría llover encima).
Ahora bien después de unas cuantas palabras bonitas, unos cuantos engaños, alguna que otra subida de pensión, una subida de becas que tampoco viene nada mal cuando de ganar votos (engañando) se trata, un insulto por acá (el señor Guerra criticando a supuestos chorizos cuando todos recordamos lo que le gustaba a él este manjar a base de carne de cerdo), un recordatorio a la gente de que el PP quiere quitar las citadas pensiones, las becas, suprimir la sanidad pública... Llegó la conclusión del acto pero...¿saben ustedes cómo?. Sí, han acertado de lleno: cantando la Internacional. ¿Se imaginan ustedes que pasaría si mañana mismo Mariano Rajoy acompañado de Manuel Fraga,  María Dolores de Cospedal y Federico Trillo, se ponen a cantar el Cara al Sol con el brazo extendido al más puro estilo fascista? Supongo que, como mínimo, los exiliarian para luego decidir si sería el Tribunal de la Haya o el de los Derechos Humanos el que los juzgara por aduladores de regímenes nada democráticos.
Pero quien manda, manda. Y volviendo al principio, el señor presidente del (des)Gobierno tiene en su poder la realización o no de sus actos. No le pega a un presidente que se considera democrático el hecho de andar realizando gestos que recuerdan a totalitarismos que tanto dolor extendieron por Europa y tanta sangre derramaron en sus purgas internas. Es obvio que el señor presidente tiene cierto grado de identificación con ciertas ideologías ya que, no podemos olvidar, que no es la primera vez que lo hace. Además como diría Aristóteles está en su poder tanto el hacerlo como no hacerlo.

8 de septiembre de 2009

"Mientras los ríos corran al mar...

...hagan sombra a los valles los montes y haya estrellas en el cielo, debe durar la memoria del beneficio recibido en la mente del hombre agradecido". Estas palabras las pronunció en su día el poeta romano Publio Virgilo Marón. La aseveración no dejan lugar a la duda, al menos en la conciencia del que no sea un necio. Si has recibido un bien por parte de alguien, debes estar siempre agradecido a dicha persona. De lo contrario difícilmente podrás ser digno de ser denominado grato.

Esta semana ha comenzado la nueva temporada radiofónica que sin duda alguna no dejará indiferente a nadie. Una temporada en la que se echarán de menos los despertares más o  menos agradables con Federico Jimenez Losantos debido a que su nueva aventura, esRadio, tiene todavía una reducida implantación nacional (si bien hay que reconocer la rápidez de su expansión).

El periodista oscense, acompañado por el historiador César Vidal y el ex-eurodiputado Carlos Herrero entre otros, deja atrás largos años de radio en la Cadena Cope (peyorativamente denominada "cadena de los obispos") medio que tantas horas de radio llenó con sus críticas, con sus durísimas críticas, y que ahora les agradece su trabajo con cuñas malintencionadas. No es raro escuchar la Cope de hoy día sin darse cuenta de que ciertas llamadas de los oyentes (previo paso por la grabación de un contestador supongo que para ser meticulosamente analizadas) son maliciosamente situadas en las horas de mayor audiencia con frases como "la Cope de ahora está más tranquila", "Prefiero el sosiego de ahora"... Dando a entender que el citado dúo de periodistas eran unos exaltados, radicales, extremistas, fanáticos...

No es un juego muy limpio, desde mi humilde punto de vista, utilizar esa estrategia para intentar tumbar el alumbramiento de una nueva radio a no ser que se trate de simple miedo a la competencia. En el mundo de la comunicación por el simple hecho de que una de sus finalidades sea informar y socializar, se deben mantener unos mínimos de decencia, marcando unos límites en cuyo exterior el profesionalismo ya no es digno de recibir dicho nombre.

Por tanto vuelvo al principio de este post para dejar claro que el agradecimiento de la Cope con los que un día contribuyeron a engrandecerla debería tener otro enfoque. Y es que el titular que dejó Jimenez Losantos antes de irse parece claro "Federico se despide superando a Carlos Herrera". Ahí es nada. Jimenez Losantos incrementó en 205.000 oyentes (14,8% más), su audiencia durante el último trimestre en la Cadena Cope situándose en 1.586.000, sólo por detrás de Carlos Francino. "La Linterna de César Vidal se consolida como el programa más escuchado en su franja horaria y en el cómputo total registra un empate técnico con "Hora 25", espacio de la SER". Los datos no mienten.

Y es que ya lo dijo Virgilio en su día, el beneficio recibido debe durar, por siempre, en la memoria del hombre agradecido.

7 de septiembre de 2009

Napoleón Bonaparte dixit...

..."es más seguro interesar a los hombres por medio de lo absurdo que por medio de ideas justas". Y por lo que se puede comprobar al encender el televisor, no importa la hora del día ni el segundo del minuto, el aserto parece evidente a nuestro ofuscado sentido visual.

Esta misma tarde he merendado con un programa, por denominarlo de alguna manera respetuosa con ellos y conmigo mismo, que dice necesitar que alguien lo salve. Dicho programa emitido en una cadena de cuyo nomb re no quiero acordarme, deja mucho que desear si de transmitir valores a la sociedad se trata. Y digo esto porque soy de los que piensa que los medios de comunicación fueron creados para transmitir valores como la cultura, el respeto, la educación... Ninguno de los anteriores se cumple, es más, basta con visionar unos minutos dicho programa para comprobar que cuando de insultar se trata son los primeros, cuando de saltarse las normas de protocolo en un  programa de televisión se trata son los primeros y, lo que más grave me parece, cuando de saltarse el horario infantil se trata dando clases de erotismo y sexualidad al más puro estilo de media noche, no tienen rival.
Es la televisión del presente, la que nos ha tocado vivir, o mejor dicho, la que les toca vivir a los más jóvenes que nacen con este muerto sin haber visto la TELEVISIÓN en mayúsculas, que confirmo si me lo permiten, algún dia existió. Los grandes programas de debates socio-políticos, los programas que complementaban en la hora de la merienda la educación de nuestros hermanos mayores, o incluso la nuestra, los programas de entretenimientos que, no por divertidos, dejaban de ser formativos y enriquecedores para el conjunto de la sociedad, empezando por los padres, siguiendo por los abuelos y terminando en los más pequeños de la casa que, quieras que no, algo se le quedaba de la culturilla general de aquellos programas...

Pero señores, señoras y señoros, esta es la televisión que nos ha tocado vivir con la llegada del nuevo siglo: la televisión en la que priman los escándalos sobre las grandes noticias, donde se pagan auténticas millonadas a analfabetos barriobajeros que viven a costa de los hijos que un dia engendraron con un famosillo de medio pelo mientras se margina al profesional cualificado y, cada vez menos, respetado; la televisión donde prima la exclusiva millonaria sobre la noticia contrastada y donde cuanto mayores sean los desmanes y los atropellos a los valores que un día nos rozaron, más audiencia se tiene.

Es lo que hay, actualidad, es lo que hay