24 de abril de 2009

Sangrante destrucción de empleo: 4.010.700 parados

Queridos lectores:

En las últimas horas se han hecho públicos los datos de la Encuesta de Población Activa referentes al primer trimestre del presente año y solo dejan lugar a un sentimiento: pesadumbre.

Los datos presentados por la vicepresidenta segunda del Gobierno y Ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado han dejado, al que más y al que menos, una sensación de temor hacia el futuro que se presenta.

Hace un año el entonces candidato a la presidencia del Gobierno, señor Rodríguez Zapatero prometía en su campaña electoral que, muy probablemente, en la presente legislatura se alcanzaría en España el pleno empleo.Un año después no podemos por más que preguntarnos si el actual presidente tenía constancia alguna de que había posibilidades de que dicha promesa la pudiera cumplir o si por el contrario ya manejaba informes, desde el año 2006, que manifestaban una desaceleración de la economía mundial muy especialmente de la española como consecuencia del inevitable pinchazo de la burbuja inmobiliaria que por entonces no dejaba de crecer peligrosamente.
Son preguntas que a día de hoy no tienen visos de ser respondidas por el presidente en una época, como la actual, en la que los ciudadanos necesitamos respuestas, pedimos soluciones. Los ciudadanos españoles empezamos a estar cansados de planes grandilocuentes que lo único que hacen es aumentar, día si y día también, el ya de por sí alto déficit en el que nos hemos embarcado o, mejor dicho, nos han embarcado.

Empezamos a detestar proyectos que solo sirven para aparentar que se está haciendo algo, que se está trabajando, que se sabe por donde se va, que se conoce cual es la solución a todo esto... pero lo único en lo que se cae es en el populismo complaciente con aquellos dispuestos a caer en las redes del engaño y la hipocresía, lo único en lo que se cae es en el despilfarro de lo público, que no es de nadie como diría alguna ex-ministra de Fomento llamada Magdalena y apellidada Álvarez, lo único en lo que se cae es en la pantomima, en la parodia, en la caricatura y en la representación de lo que parece ser una auténtica obra teatral constante de un ejecutivo que está más perdido que un vasco en el Rocío como dirían algunos.

No daba crédito esta mañana cuando, con los desastrosos datos del paro en sus manos, la ministra Elena Salgado intentaba buscarles el lado "bueno" a las escandalosas cifras que sitúan nuestra tasa de paro en el 17,36% (barajaban un 15,9% para todo el presente año) . Ahí es nada. Hacía referencia a la reducción de la temporalidad en los últimos años, al incremento de los contratos indefinidos... Sinceramente creo que es una desfachatez que con más de 4 millones de parados sus palabras vayan encaminadas a la alabanza propia en vez de al reconocimiento de sus propios errores, al ensalzamiento de sus políticas, fracasadas como demuestra cada día la realidad, en lugar de ponerse a trabajar en una dirección certera y con un rumbo que en 5 años todavía no han encontrado.

Las excusas en tiempos de crisis no le valen al ciudadano. Las palabras vacías de contenido tampoco. Ni siquiera las palabras únicamente citadas con el propósito de encandilar a los conciudadanos y de dejarlos contentos. Nada de eso vale por la sencilla razón de que para lo único que sirven es para perder el tiempo. No olvidemos que el tiempo es oro y que cuando no hay segundos que perder ni siquiera es oro. No tiene precio.

Pero claro, si lo que pedimos es ideas a un Gobierno que nunca las ha tenido, en materia económica muy especialmente, va a ser complicado que nuestras súplicas sean atendidas. Si lo que pedimos es políticas de contención del gasto público a un Gobierno que parece convencido de que con millones y miles de millones de euros se solucionará la crisis, es complicado que algún día el déficit deje de aumentar y consecuentemente es muy difícil que las futuras generaciones se libren de sufrir el déficit público abismal del que ellos no han tenido culpa alguna.
No obstante el que no se consuela es porque no quiere. De hecho si alguno de ustedes quiere poner a prueba su optimismo, muy pero que muy a prueba, no tiene más que creer las palabras de la ministra Elena Salgado en las que dice que en Abril ya empezará a remitir la destrucción de empleo (decía lo mismo el presidente pero en referencia a Marzo no hace mucho) ya que, siempre según ella, los datos de la contratación del Fondo de Inversión Local están siendo mejores de los esperados. Pues anda que si fuesen peores de lo esperado...
En fin un cúmulo de huidas hacia delante, de palabras que pretenden esperanzar pero que no lo consiguen ni de lejos, de gestos que dan más incertidumbre a las sociedad de la que pretendían quitarle y de planes ineficaces además de ineficientes puesto que lo único que están consiguiendo es incrementar de manera desmesurada el déficit público.
Hasta pronto.

1 comentario:

Mª Ángeles dijo...

...Y lo que nos queda por ver...
Por cierto, esa misma foto la puse yo en mi blog para decir más o menos lo mismo que tu.
Espero que en las europeas al menos la gente tenga la suficiente cordura para votar a quien debe.
Un saludo enorme